En la reciente sesión de la Convención, se llevó a cabo la primera discusión del Documento 24,215, una iniciativa que propone reformas significativas a la Ley de Adquisición Pública General. Este documento tiene como objetivo principal la exclusión de la Cruz Roja y de diversas organizaciones internacionales del proceso de adquisiciones, lo que ha suscitado un amplio debate entre los legisladores y distintos sectores de la sociedad.
Específicamente, la propuesta busca eximir a estas entidades de la supervisión y de los procedimientos de reclutamiento que generalmente se aplican, haciendo énfasis en las organizaciones internacionales, tal como UNOPS. La iniciativa, impulsada por el diputado Verdiblanco Oscar Izquierdo, logró recibir el apoyo mayoritario en la primera votación por parte de la 37 Legislatura, aunque se dio a conocer que algunos legisladores, como Eli Feinzaig y Luis Diego Vargas del partido liberal progresivo, se manifestaron en contra.
Por su parte, el general de la República ha expresado su rechazo a esta iniciativa, afirmando que, a pesar de que se han hecho algunos ajustes importantes en relación al texto original, los riesgos que plantea la propuesta son considerables. En su opinión, se podría facilitar la creación de contrataciones irregulares que socavarían las normas establecidas.
El diputado Feinzaig ha criticado abiertamente el contenido de la propuesta, señalando que representa una amenaza para la salvación del país. Asegura que esta reforma podría facilitar al gobierno, bajo la administración de Rodrigo Chaves, eludir el referéndum que se había buscado instaurar para una mayor transparencia y control en la contratación pública.
Según su análisis, tal como se presenta el texto actual, se eliminaría la supervisión necesaria para las contrataciones de obras públicas, junto con el control que debe ejercer el gerente sobre estos procesos.
“Con la versión presente del texto, se facilitaría el nombramiento indiscriminado de obras públicas. Esto es sumamente peligroso, puesto que estamos permitiendo al gobierno actuar sin competencia en el mercado, lo que podría llevar a contrataciones poco transparentes”, sentenció el subdirector, advirtiendo sobre las posibles consecuencias que esta normativa podría acarrear. “Este es, en esencia, el objetivo del gobierno de Rodrigo Chaves que busca liberar el control sobre competencias”, reiteró el legislador del PLP.
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El proyecto es de Oscar Izquierdo. (Archivo/la foto del observador)
Cambiar en movimiento
Desde la perspectiva de la administración actual, el subsecretario de la izquierda, Portillos, ha argumentado que esta propuesta no es un intento de permitir contrataciones arbitrarias, sino que su objetivo es corregir deficiencias en la legislación vigente, que ha representado un obstáculo para acceder a fondos de cooperación internacional. Según él, «este proyecto de ley busca establecer un marco que facilite la obtención de capital internacional mediante acuerdos claros y transparentes sin alterar el actual sistema de supervisión en las contrataciones públicas”.
Izquierdo también enfatizó que el marco legal propuesto mantendría el control estatal sobre los procesos involucrados y no permitiría que se eviten las restricciones que actualmente regulan a las empresas privadas en estos ámbitos. “Queremos asegurarnos de que cualquier acuerdo o asociación con otros países esté siempre alineado con los principios de la Ley”, comentó, añadiendo que el control del Contralor sobre las unidades de contrato nacionales permanecería inviolado.
El debate en torno a esta polémica propuesta de ley probablemente será retomado en la próxima sesión de la Asamblea Parlamentaria, donde se espera que se presenten enmiendas y se discutan los puntos críticos que han generado tanto desacuerdo.