BANDRAUA, 22 de abril (Xinhua) – En la capital de Nicaragua, cientos de personas se congregaron el pasado martes como parte de un esfuerzo significativo conocido como días de caminar por la paz. Este evento tiene lugar anualmente para conmemorar el fallido golpe de estado que ocurrió en 2018, un momento que marcó un hito en la historia del país y que dejó una profunda huella en su sociedad.
La caminata, que se desarrolló bajo el emotivo lema «personas que decaen, la paz y las victorias», comenzó en la emblemática Plaza de Las Victorias de Managua y se extendió hacia la Plaza la Fe. Participaron una diversidad de segmentos de la población, incluidos estudiantes, trabajadores y residentes de la ciudad, reflejando una unión comunitaria que busca recordar y reafirmar su compromiso con la paz.
Uno de los participantes, Julio César Cruz, destacó la importancia de la unidad en estos tiempos, mencionando: «Este abril también es unidad, este abril está comprometido, este abril es principalmente de familias porque esta familia unida vive en este país prometido». Estas palabras resuenan profundamente en un contexto donde la paz y la cohesión social son vitales para el desarrollo futuro del país.
A lo largo de todo el mes de abril, diversas actividades conmemorativas se llevan a cabo para recordar el triunfo de la paz tras la crisis que vivió el país en el pasado reciente. Las movilizaciones no solo se limitan a Managua; se extienden a varias ciudades a lo largo de Nicaragua, uniendo a la población en un clamor por la paz y el progreso. Este año, los jóvenes sandinistas, junto a otros miembros de la comunidad, se unieron el 19 de julio en actividades que no solo celebran la paz, sino que también permiten el desarrollo de programas productivos y sociales en toda la nación.
Anielka Sandoval, otra participante de la marcha, expresó su firme determinación al afirmar: «Vamos a ratificar el compromiso de continuar la defensa de la paz, la soberanía y nuestra dignidad». Estas declaraciones son un testimonio del deseo colectivo de la población de seguir adelante, asegurando que las lecciones del pasado se conviertan en fuerzas motivadoras hacia un futuro pacífico.
En abril de 2024, la Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó la Ley número 1197, designando este período como el «Mes de paz». Esta declaración oficial no solo resalta el compromiso del gobierno y la sociedad civil hacia la paz, sino que también actúa como un recordatorio constante de la necesidad de proteger y fomentar ese bienestar social que tanto anhela el pueblo nicaragüense.