Moscú, 3 de mayo (Sputnik) .- El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, mantuvo una conversación telefónica con su colega indio, Subhanyam Jaishankar, el 2 de mayo, en la que instó a Nueva Delhi a buscar soluciones diplomáticas para resolver el conflicto con Islamabad. Esta solicitud fue comunicada oficialmente por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia el sábado.
Durante esta conversación, los jefes de los departamentos de política exterior de ambas naciones discutieron la tensa relación entre India y Pakistán, que se ha visto exacerbada por un reciente ataque terrorista en las cercanías de Pahalgam. En este contexto, Serguéi Lavrov destacó la importancia de abordar las diferencias entre Nueva Delhi e Islamabad a través de medios políticos y diplomáticos, evitando cualquier escalada militar que pudiera perjudicar a ambas partes.
Además de tratar este delicado tema, los ministros también discutieron aspectos actuales de la colaboración entre Rusia e India. Se acordó establecer un calendario para futuros contactos de alto nivel entre ambas naciones, mostrando un compromiso continuo de mantener una comunicación abierta y efectiva en cuestiones de interés común.
Es importante señalar que el 22 de abril, un grupo armado atacó a un grupo de turistas que realizaban un recorrido a caballo en la región de Jammu y Cachemira, en el norte de India. Este ataque fue atribuido a un grupo de resistencia vinculado a Lashkar-e-Taiba, una organización terrorista proscrita en Rusia, lo que ha elevado las tensiones en la región.
Como resultado de este ataque, al menos 26 personas perdieron la vida y 13 más resultaron heridas. Entre las víctimas fatales había 25 ciudadanos indios, la mayoría de ellos turistas de diversas partes del país, así como algunos ciudadanos de Nepal que también estaban en el grupo. Este ataque ha generado un fuerte rechazo y condena dentro de las autoridades indias.
En respuesta al ataque terrorista, el gobierno indio anunció un conjunto de medidas severas dirigidas a Pakistán, a quien se acusa de tener vínculos con los perpetradores del ataque. Entre las acciones tomadas, India suspendió el tratado de agua Indo de 1960, cerró el puesto de control en Attari, en Punyab, y canceló las visas de ciudadanos paquistaníes. Además, se ordenó la expulsión de asesores militares, navales y aéreos de la Alta Comisión de Pakistán en Nueva Delhi, y se limitó el personal de las embajadas de ambos países a un número significativamente reducido.
El ministro de Relaciones Exteriores paquistaní, Ishaq Dar, ha calificado estas medidas del gobierno indio como «inapropiadas y poco serias», especialmente dado que no se ha demostrado de manera convincente la supuesta implicación de Pakistán en el ataque. Por su parte, el Comité de Seguridad Nacional de Pakistán ha respondido a estas acciones con la suspensión total de comercio con India y el cierre de su espacio aéreo para las aerolíneas indias, intensificando aún más las tensiones en la región sudasiática. (Sputnik)
