Médicos Sin Fronteras reporta muertes y heridos tras el ataque a un hospital en el sur de Sudán.

Ataque del hospital MSF en Old Fangak, Sudán del Sur. MSF

Ginebra (Suiza), 3 de mayo (Sputnik) .- La organización médica sin fines de lucro Médicos Sin Fronteras (MSF) ha reportado la trágica situación del bombardeo de su hospital en la ciudad de Old Fangak, ubicada en el norte de Sudán del Sur, que ha dejado a varios muertos y heridos. Este incidente es un claro recordatorio del impacto devastador de la violencia en zonas donde la atención médica es escasa.

En su declaración a través de la red social X, la organización expuso: «Hoy (sábado) fue bombardeado el Hospital MSF en Old Fangak, y la farmacia fue destruida, lo que resultó en la pérdida total de todos los medicamentos. Hay informes de víctimas fatales y heridos”. Estas palabras resaltan la gravedad de la situación en la región y el ineludible impacto que tiene en la población civil.

MSF detalló que el ataque, aparentemente llevado a cabo por helicópteros, ocurrió alrededor de las 4:30 de la mañana, hora local (2:30 GMT) el 3 de mayo, y que, además del hospital, un dron del mercado cercano también fue alcanzado por las bombas. Este tipo de ataques indiscriminados solo incrementa el sufrimiento de una comunidad ya vulnerable, que depende en gran medida de instalaciones como la de MSF para recibir atención médica crítica.

Lo alarmante es que la organización había compartido previamente las coordenadas GPS de su instalación con todas las partes involucradas en el conflicto, subrayando la gravísima falta de respeto por las normas del derecho humanitario. El hospital que fue atacado era la única fuente de atención médica vital para más de 40,000 residentes de la zona, y su destrucción compromete seriamente la salud y seguridad de toda esta población.

El contexto del ataque es igualmente preocupante, ya que se sabe que fuerzas leales al presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, están actualmente enfrentadas con tropas del primer vicepresidente Riek Machar y su grupo, el SPLM-I, en una lucha de poder que ha resultado en arrestos y tensiones escalofriantes. Las acciones recientes han suscitado temores sobre el futuro del acuerdo de paz firmado en 2018, el cual terminó un conflicto civil que dejó un saldo trágico de aproximadamente 400,000 muertes.

Las comunidades que han sobrevivido a esta violencia necesitan desesperadamente la seguridad y la atención médica continua que organizaciones como MSF brindan. Sin embargo, el ataque a su hospital es un golpe devastador que podría tener repercusiones a largo plazo en la salud pública y la estabilidad social de la región. La situación actual en Sudán del Sur, marcada por el conflicto y la crisis humanitaria, exige urgentemente la atención de la comunidad internacional.