Simion y Antonescu podrían participar en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Rumania.

Chisinau, 4 de mayo (Sputnik) .- En un emocionante giro político en Rumania, George Simion, el líder de la alianza opositora conocida como el Partido de Alianza para la Unión de los Rumanos (AUR), ha logrado posicionarse frente a Crin Antonescu, el candidato del gobierno en la segunda ronda de las elecciones presidenciales. Esta decisión se debe a que ninguno de los aspirantes logró obtener el 50% de los votos en la primera ronda. Según la información divulgada por la Comisión Electoral Central, se ha contabilizado el 90.01% de las boletas, lo que proporciona una visión preliminar de los resultados.

Hasta el momento, Simion ha acumulado un notable 40.13% de los sufragios, mientras que su rival, Antonescu, ha alcanzado un 21.15%. Los otros candidatos incluyen al actual alcalde de Bucarest, Nicusor Dan, que ha logrado un 19.43%, y el ex primer ministro rumano, Victor Ponta, con un 14.32% de los votos. Estos porcentajes reflejan un panorama electoral en el que Simion se ha presentado como el candidato más fuerte en una contienda que cuenta con un total de 11 nombres en la boleta electoral.

Las elecciones, que se celebran cada cinco años, se desarrollaron sin un umbral mínimo de participación; esto significa que la validez de la elección no se verá afectada por el número de votantes. Los ciudadanos están siendo llamados a decidir quién tomará el relevo del actual presidente Klaus Iohannis y, por ende, el rumbo que tomará el país durante los próximos cinco años.

En la recta final de la campaña, una encuesta realizada por Mkor había otorgado a Simion una ventaja considerable, con un 33.1% de apoyo popular. Antonescu ocupó el segundo lugar con un 21%, seguido de cerca por Nicusor Dan, que obtuvo un 19.4%. Si ninguno de los candidatos logra aún obtener más del 50% de los votos, se procederá a una segunda vuelta programada para el 18 de mayo.

En las elecciones presidenciales anteriores, llevadas a cabo el 24 de noviembre, el candidato independiente Calin Georgescu se destacó con un 22.94% de los votos. Su campaña, a menudo destacada por el uso de plataformas como TikTok, fue objeto de críticas por algunos medios que lo catalogaron de ‘ultranacionalista’ y ‘pro-ruso’. Georgescu se enfrentó, entre otros, a Elena Lashoni, una líder sindical que defendió una postura pro-europea y que logró el 19.18% de los sufragios.

No obstante, el 6 de diciembre, el Tribunal Constitucional de Rumania anuló los resultados de la primera ronda de esas elecciones, tras una investigación sobre supuestas irregularidades en la campaña. Las autoridades señalaron que el candidato Georgescu había recibido un notable apoyo en línea, derivado de una red de 25,000 cuentas en TikTok, lo cual generó preocupaciones sobre la legitimidad de su campaña.

Georgescu intentó apelar esta decisión, llevando su caso primero ante el Tribunal de Apelaciones y posteriormente ante la Corte Suprema de Rumania, pero su esfuerzo fue finalmente rechazado, dejando la controversia sin solución. Este ambiente electoral tenso y lleno de desafíos resalta la complejidad y la dinámica de la política contemporánea en Rumania. (Sputnik)