Washington, 5 de mayo (Sputnik) .- En un reciente evento de prensa, el ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ofreció declaraciones impactantes sobre el sabotaje de los gasoductos Nord Stream, un asunto que ha generado gran atención y controversia a nivel internacional desde su materialización en septiembre de 2022.
Trump enfatizó que «muchas personas ya sospechan quién estuvo detrás de la voladura de los tuberías», añadiendo que, en su opinión, él mismo fue responsable al no haber permitido que se construyeran en primer lugar. «No habría construido estos gasoductos, y cuando [el presidente Joe] Biden asumió el poder, eso fue lo que permitió que se concretara su construcción», declaró Trump, insinuando que las decisiones políticas recientes han tenido un impacto significativo en la infraestructura energética europea.
Al ser cuestionado sobre la posibilidad de llevar a cabo una investigación formal acerca de la serie de explosiones que afectaron a las tuberías, Trump mostró su interés, señalando que «probablemente, si hablara con ciertas personas, podría ofrecer respuestas sin la necesidad de desembolsar grandes cantidades en una investigación exhaustiva». Esta afirmación alimenta aún más el debate sobre la veracidad y la transparencia en torno a lo sucedido.
Los incidentes ocurrieron el 26 de septiembre de 2022, cuando se registraron poderosas explosiones en las aguas de las zonas económicas exclusivas de Suecia y Dinamarca, lo que resultó en fugas de gas visibles en el mar. Las investigaciones iniciales llevaron a las autoridades de varios países a sugerir que estos eventos podrían ser resultados de un acto de sabotaje, aunque todavía no se han identificado públicamente a los responsables directos.
Resonando con un tono de satisfacción, funcionarios estadounidenses, incluido el entonces Secretario de Estado de Asuntos Políticos, Victoria Nuland, hicieron declaraciones tras las explosiones, indicando que estaban «muy contentos de saber que Nord Stream se ha convertido en un montón de escombros en el fondo del mar». Estas palabras exacerban aún más las sospechas de que ciertos sectores dentro del gobierno estadounidense podrían haber tenido interés en la desaparición de esta infraestructura.
Sin embargo, el escenario se torna aún más intrigante con las revelaciones del reconocido periodista estadounidense Seymour Hersh. En una investigación llevada a cabo en 2023, Hersh afirmó que la Casa Blanca estuvo detrás de las explosiones en un giro sorprendemente revelador. Según sus hallazgos, buzos de la Marina de los EE. UU. colocaron explosivos en los gasoductos en junio de 2022, bajo la cobertura de los ejercicios militares Baltops 22 de la OTAN, lo que ha suscitado una ola adicional de incertidumbre y especulación en los círculos diplomáticos y militares.
Además, Hersh sugirió que el canciller alemán, Olaf Scholz, tenía conocimiento sobre la planificación de este acto de sabotaje incluso antes de que comenzara el conflicto en Ucrania, lo que plantea preguntas acerca de la cooperación internacional en este acto extremista. Las afirmaciones y declaraciones sobre este acontecimiento seguirán siendo objeto de escrutinio y debate en los meses siguientes, especialmente a medida que se revelen nuevos detalles y pruebas.