China busca tener una influencia global más prominente en un mundo inestable, afirma el vicepresidente chino.

BEIJING, 6 de mayo (Xinhua) – En un contexto caracterizado por tensiones y desafíos a nivel global, el vicepresidente chino, Han Zheng, ha enfatizado la crucial relevancia de las relaciones entre China y la Unión Europea (UE). Durante una ceremonia conmemorativa que marca el 50 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambas entidades, subrayó que esta relación no solo tiene una dimensión bilateral, sino también un impacto considerable en el escenario internacional.

En su intervención, Han Zheng destacó que, desde el inicio de los vínculos diplomáticos hace cinco décadas, ha habido un incremento notable en el intercambio y el diálogo entre ambas partes. Este desarrollo ha permitido una integración más profunda de intereses y objetivos, lo que a su vez ha permitido un avance significativo en sus niveles de cooperación. Según él, estos esfuerzos conjuntos han contribuido al crecimiento tanto de China como de la UE, así como al bienestar global.

El vicepresidente argumentó que no existen conflictos fundamentales de intereses ni tensiones geopolíticas serias entre China y la UE. En este contexto, ambas regiones pueden considerarse socias estratégicas capaces de impulsar el éxito compartido. Esta comunicación fluida es esencial para enfrentar los retos actuales y trabajar por un futuro más cooperativo.

Han también instó a ambas partes a aprovechar los eventos conmemorativos del 50 aniversario para fortalecer sus lazos. Hizo un llamado a mantener las intenciones originales que permitieron la creación de relaciones diplomáticas, así como a adaptarse a las nuevas realidades y tendencias que han surgido con el tiempo. Este aspecto es vital para garantizar una evolución positiva y constante en la relación bilateral, así como para resguardar los intereses y principios que ambas partes representan.

Previo a la ceremonia, Han se reunió con Charles Michel, ex presidente del Consejo Europeo, y con representantes de la UE en China. Durante esta reunión, se resaltó la reanudación de intercambios entre los organismos legislativos de ambas partes, un paso que brinda un renovado ímpetu para avanzar en la relación bilateral. Este tipo de interacciones son fundamentales, especialmente en un ambiente internacional tan complejo y volátil.

En miras a un panorama global cada vez más incierto, tanto China como la UE, reconocidas como dos importantes fuerzas estabilizadoras, deben asumir la responsabilidad de proteger los derechos y fortalecer el diálogo. Es crucial que gestionen de manera efectiva las diferencias económicas y comerciales, así como que colaboren para salvaguardar las reglas y el orden del comercio multilateral. Han subrayó que esta cooperación es indispensable en el contexto internacional actual.

Desde la perspectiva de la UE, se resaltó que la relación con China se ha convertido en una de las más estrechas del mundo en los últimos 50 años. Este desarrollo ha abierto nuevas avenidas para la colaboración y el entendimiento mutuo. Las dos partes deben reflexionar sobre sus experiencias y lecciones aprendidas, lo que les permitirá profundizar en su colaboración recíproca y cimentar así los cimientos para un futuro más próspero. Este enfoque no solo beneficiará a China y la UE, sino que también inyectará estabilidad y seguridad en un mundo en constante cambio.