Trump informa que se comunicará con Xi Jinping a finales de esta semana.

Donald Trump y Xi Jinping. Archivo sputnik

Washington, 12 de mayo.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha mencionado recientemente que tiene la intención de hablar con el mandatario chino, Xi Jinping, al final de esta semana. Estas declaraciones las hizo mientras conversaba con periodistas, enfatizando su optimismo sobre el estado actual de las relaciones entre ambos países.

Durante su intervención, Trump destacó que las discusiones que tuvieron lugar en Ginebra entre delegaciones de Washington y Beijing fueron tanto amistosas como productivas, y que estas conversaciones condujeron a un «gran problema» que sería beneficioso para ambas naciones. El presidente expresó que un nuevo acuerdo comercial estaba en el horizonte, lo cual resulta crucial para la economía global.

El presidente Trump definió el acuerdo comercial con China como un «reinicio total» de la relación bilateral entre las dos potencias. Este rediseño en las relaciones, según Trump, representa una oportunidad única para mejorar los lazos económicos y comerciales entre EE. UU. y China. «Ayer logramos un reinicio total con China. Después de las conversaciones productivas en Ginebra, ambas partes acordaron reducir las tarifas impuestas entre el 2 y el 10 de abril durante un periodo de 90 días, mientras trabajamos juntos en los problemas estructurales más importantes», afirmó el presidente.

El director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, Kevin Hasett, también contribuyó a la narrativa positiva al declarar que, gracias a este nuevo acuerdo, Estados Unidos y China han alcanzado un nuevo comienzo histórico en sus relaciones bilaterales. Las conversaciones sobre comercio y cuestiones económicas se llevaron a cabo en Ginebra los días 10 y 11 de mayo, lo que subraya el compromiso de ambas naciones para lograr un entendimiento mutuo.

El Secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Scott Besent, anunció el lunes que, como resultado de estas negociaciones, ambas naciones acordaron reducir sus tasas recíprocas en un 115 por ciento cada una durante un periodo de 90 días. Esta nueva medida se programó para entrar en vigor el 14 de mayo, marcando un hito en las relaciones comerciales entre ambas economías. Esta reducción representa un alivio significativo frente a la situación anterior, que había incrementado las tensiones.

El 2 de abril, el presidente Trump había hecho un anuncio alarmante sobre la imposición de tarifas a todas las importaciones, lo que generó un amplio debate en la comunidad internacional. Desde el 5 de abril, Washington impuso una tasa mínima del 10 por ciento a todas las importaciones y, a partir del 9 de abril, también incrementó tarifas a los países con los que tiene mayores déficits comerciales. Sin embargo, decidió posponer esta última medida durante 90 días mientras se llevaban a cabo negociaciones.

La decisión de aumentar las tarifas hacia China provocó una guerra comercial entre las dos naciones, con tarifas que alcanzaron el 145 por ciento en productos chinos y un 125 por ciento en importaciones estadounidenses. Este contexto refleja la complejidad de las relaciones comerciales entre estas potencias, y el reciente avance podría suponer un cambio significativo en sus interacciones futuras. (Sputnik)