En una reciente declaración desde Caracas, el 14 de abril, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestro América (Alba-TCP) ha emitido una fuerte condena ante lo que denominan una «acción irregular» en la segunda vuelta electoral que tuvo lugar en Ecuador el pasado domingo. Este evento electoral fue crucial, ya que tenía como objetivo elegir tanto al presidente como al vicepresidente del país andino.
El organismo expresó su preocupación tras observar los sucesos que rodearon las elecciones, haciendo hincapié en que la reacción a la protesta encabezada por un prominente líder de manifestación fue un indicio negativo en la dinámica de la votación. La denuncia abarca una serie de irregularidades que, según la organización, mancharon el proceso democrático en su totalidad.
En el escrito emitido, la Secretaría Ejecutiva de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba-TCP) condena esta irregularidad, señalando que las elecciones se llevaron a cabo bajo condiciones excepcionales y poco comunes. Estas condiciones impactaron particularmente en provincias donde históricamente ha existido una tradición fuerte de votación popular, todo esto en un contexto de alarmantes niveles de intimidación hacia los votantes y de ventajas evidentes otorgadas por la administración del presidente en funciones, Daniel Novoa.
Asimismo, el bloque regional manifestó su respaldo a la urgencia de revisar el proceso electoral a través de una investigación meticulosa. El comunicado destaca que el Alba-TCP valora la determinación democrática del pueblo ecuatoriano en su defensa de la soberanía y la democracia, instando a una verificación rigurosa del proceso electoral. Esta revisión debe incluir una auditoría minuciosa de todos los procedimientos implementados, así como una actualización clara y transparente de los resultados finales.
En relación a los resultados de la votación, el Consejo Electoral Nacional de Ecuador (CNE) anunció que Novoa fue declarado ganador en la segunda vuelta presidencial, compitiendo contra la candidata de izquierda, Luisa González. La falta de reconocimiento de los resultados fue un aspecto destacado por González, quien se dirigió a sus seguidores en un discurso vehemente en el que denunció un presunto «fraude electoral».
El candidato opositor también dejó claro su intención de exigir un «reconteo de votos» así como la apertura de los colegios electorales para asegurar la transparencia del proceso. Con los resultados preliminares indicando que, con un 93.14 por ciento de los votos contabilizados, Novoa estaba obteniendo aproximadamente el 55.83 por ciento frente al 44.17 por ciento de su contrincante, el debate sobre la legitimidad de las elecciones está lejos de resolverse.
Se estima que más de 13.7 millones de ciudadanos ecuatorianos acudieron a las urnas el domingo. Según los datos proporcionados por el CNE, la jornada electoral culminó con una notable participación del 83.7 por ciento. Finalmente, está previsto que el nuevo gobierno de Ecuador tome posesión el 24 de mayo para un mandato de cuatro años. (Sputnik)