Chisinau, 5 de mayo (Sputnik) .- En un giro significativo en la política rumana, el nacionalista George Simion, de 38 años y líder del partido de oposición Alianza para la Unión de Rumanos (AUR), ha captado una notable atención pública tras anunciar que ha logrado un 40.96% de apoyo en la primera ronda de votaciones presidenciales que se celebró el pasado domingo. Este respaldo, según la Autoridad de Elecciones Permanentes (AEP), pone a Simion en una posición muy competitiva para la segunda ronda de elecciones programada para el 18 de mayo.
En esta segunda vuelta, Simion se enfrentará al actual alcalde de Bucarest, Nicusor Dan, quien obtuvo un 20.99% de los votos en la ronda inicial. La competencia se espera reñida, ya que Dan superó al candidato oficial Crin Antonescu por un estrecho margen de solo 0.92 puntos porcentuales, quien se quedó con un 20.07% de apoyo. Esta dinámica electoral es un reflejo de un clima político en el que las fuerzas nacionalistas parecen estar ganando impulso, mientras que los partidos tradicionales enfrentan desafíos significativos.
Cabe recordar que la votación del pasado domingo representó una repetición de las elecciones presidenciales que ocurrieron el 24 de noviembre, donde el candidato independiente Calin Georgescu se destacó logrando un 22.94% de los votos. Georgescu, que ha sido descrito por muchos medios de comunicación como ‘ultranacionalista’ y con inclinaciones ‘prorrusas’, llevó a cabo una campaña utilizando la popular red social TikTok para captar la atención de los votantes más jóvenes. Su estrategia fue, sin duda, innovadora y le permitió posicionarse como un contendiente relevante.
La campaña de Georgescu también ha estado marcada por una feroz competencia, donde emergió como el segundo candidato con más votos, logrando un notable 19.18%. Sin embargo, a pesar de su éxito inicial, el Tribunal Constitucional de Rumania intervino y declaró vacíos los resultados de la primera ronda el 6 de diciembre, tras una exhaustiva investigación de los materiales desclasificados de los servicios secretos que revelaron irregularidades serias de conducta electoral.
Las autoridades también indicaron que unas semanas antes de las elecciones, se había manipulado la candidatura de Georgescu mediante una red extensa de 25,000 cuentas en la plataforma TikTok, lo que generó inquietudes sobre la legitimidad de su apoyo. En respuesta a esta decisión judicial, Georgescu no se quedó de brazos cruzados y decidió apelar el veredicto ante el Tribunal de Apelaciones y posteriormente ante la Corte Suprema de Rumania, aunque su solicitud fue rechazada, complicando aún más su posición en el escenario político actual. (Sputnik)