Más de 1,600 fallecidos en solo tres meses en Haití.

Port Príncipe, 2 de mayo (Latin Press) — La situación de violencia en Haití, alimentada por una coalición de pandillas, ha dejado a la población en un estado de terror absoluto, con más de mil 600 muertes registradas en un lapso de solamente tres meses. Este alarmante aumento de la violencia ha suscitado preocupación tanto a nivel nacional como internacional, reflejando un ambiente de inseguridad y desesperación.

De acuerdo con datos proporcionados por la oficina integrada de las Naciones Unidas en Haití (Binuh), se reportaron mil 617 homicidios, 580 heridos y 161 casos de secuestro entre enero y marzo del año en curso. Estas estadísticas son un claro indicativo de la inestabilidad que se vive en el país, donde los enfrentamientos entre diferentes bandas, actos de justicia colectiva y la violencia ejercida por grupos de autodefensa han incrementado, además de ciertas operaciones de la Policía Nacional de Haití, según el informe de BITUH. Este inquietante panorama ha sido documentado y compartido a través de diversas plataformas digitales de Haití.

Las consecuencias de esta violencia han tenido un impacto especialmente devastador en los grupos más vulnerables de la sociedad, como lo son las mujeres y los niños. El informe de Binuh resalta que se han contabilizado 333 sobrevivientes de violencia sexual durante el mismo periodo, con un impactante 96% de estos casos correspondiendo a violaciones en grupo perpetradas por miembros de pandillas. La inocencia de los más jóvenes se ha visto vulnerada, con la muerte de 35 niños y otros diez que han resultado heridos en medio del caos generado por estos grupos armados.

Entre los reportes más preocupantes se han documentado varios casos de reclutamiento forzoso de menores por parte de organizaciones criminales, lo cual plantea un futuro incierto para la juventud haitiana. La Agencia Internacional de Derechos Humanos ha señalado que, durante este trimestre, un total de 25 personas fueron arrestadas, lo que ha señalado una evidente crisis en las condiciones de las cárceles del país, que ya enfrentan una gran sobrepoblación y condiciones inhumanas.

La situación de desplazamiento interno ha alcanzado niveles alarmantes, con un total de un millón de 41 mil 229 personas desplazadas hasta el 31 de marzo. Esta creciente cifra es testimonio de la incertidumbre y del fracaso en proporcionar respuestas sostenibles a las comunidades que se han visto afectadas. La experiencia de estos ciudadanos refleja la desesperanza y la falta de soluciones efectivas para abordar la crisis humanitaria que enfrenta Haití actualmente.